lunes, septiembre 24, 2007

Un gran fin de semana I : Viernes

Este viernes acudí por segundo año consecutivo al musical que realiza Tatakae como parte de las "Jornaicas de manga y anime de Zaragoza".


El año pasado la obra fue "Saint Seiya, el Tapiz de Atenea", acudía al evento en compañía de MaX.

A pesar de algunos problemas técnicos (el inicio sufrió un retraso de más de una hora) el nivel de las interpretaciones y del vestuario superó con mucho mis expectativas y salí de la obra con la sensación de haber visto un magnífico homenaje a esa gran serie que es "Los Caballeros del Zodiaco".



Por eso este año tenía muchas ganas de ir, más aun cuando se sumo a la convocatoria Ireth.

En esta ocasión los miembros de la asociación de teatro de Tatakae trataban una historia que no pertenecía a ninguna serie en concreto, sino que tomaba personajes de varias de ellas.


La trama giraba entorno a un grupo de estudiantes que de forma espontánea se transforman en personajes de animes o videojuegos.












El mix era bastante curioso al enfrentar, por ejemplo, a Chicho Terremoto contra Misa Amane (Death Note), el resultado era una obra bastante decente y sobre todo muy divertida.



Por supuesto los problemas técnicos tuvieron un lugar en la obra, pero nada que no se pueda perdonar a un grupo de estas características.

http://mangaku.tatakae.com/

Una experiencia muy recomendada para todos los públicos, aunque por supuesto especialmente para los otakus.

2 comentarios:

Ireth dijo...

Un gran musical! Y por lo que me has enseñado creo que el del año pasado fue peor y que el playback les ha sentado bien.

Tuvieron sus problemillas técnicos pero estuvo genial: la historia, los personajes, los disfraces, se lo habían currado. Me gustó todavía más de lo que pensaba, me sorprendió, de verdad.

Así que ya estoy deseando repetir (siempre que sea contigo, claro ;-)).

fergusrg dijo...

Encantado de repetir en las próximas ediciones del musical siempre que se repita la calidad de la obra y sobre todo de los acompañantes.

Al único que espero no ver la próxima vez es al guardia de seguridad quejandose por que he hecho saltar la alarma del edificio.