miércoles, febrero 14, 2007

Los videojuego según el "Instituto de la mujer"

El Gobierno en su infatigable intento de mejorar esté país invirtió nuestro dinero en una bella causa, un estudio del "Instituto de la mujer" sobre los videojuegos.

Después de leerlo, yo solo llego a 2 conclusiones:
  • Las mujeres del "Instituto de la mujer" saben tanto de videojuegos, como el "Instituto de leñadores" sobre el apareamiento del pingüino emperador.
  • La capacidad de provocar risa de una persona es proporcional a lo que dicha persona desconozca sobre el tema y a lo que intente aparentar que sabe.
Recomiendo la lectura del texto completo y cito mi parte favorita..

La crítica del Mario Kart
No prima la deportividad en estas competiciones, sino que se intenta hacer todas las trampas posibles: tomar atajos, dispararse unos a otros, etc. Resulta evidente que la concepción de fondo de este videojuego es, entre otras, que el espíritu deportivo es un valor “antiguo” y de “amateurs”.

Mario es el héroe. Es el que resuelve los problemas, las situaciones más complicadas. Si la princesa es raptada, será él, el hombre el que irá a solucionar el problema. Es el héroe individual. La fuerza colectiva no sirve, son los individuos aislados, dotados de poderes excepcionales los que triunfan. Es el modelo capitalista, en versión de cuento de las Mil y una Noches.

En la saga de Mario son curiosos los matices que presenta el rol femenino. Ella establece relaciones “maternales” con el protagonista, por ejemplo cuando tiene algún problema o le han dado muchos golpes. Pero aún cuando se inclina preocupada para ver su estado de salud, es ella la que le incita a pelear para salvarla: “tu lo puedes hacer Mario”. Como se ve, el estereotipo machista por el que se asume que las mujeres reclaman ser defendidas, incluso de manera violenta, se hace explícito en este comportamiento.

La violencia en el juego no es una elección, es irremediablemente la vía única. No hay ninguna opción dentro del juego para que Mario pueda huir cuando se enfrenta con Bowser. Tiene inevitablemente que pelear. No puede rehuir la confrontación. Ha de “mostrarse como un hombre de verdad” y luchar por el honor de la princesa que está en peligro.

Simplemente genial, yo creo que los analistas políticos de TNT saben más de lo que hablan que esta gente.

http://blog.adlo.es/2006/08/con_el_dinero_de_los_demas_1_s.html
http://blog.adlo.es/2006/08/con_el_dinero_de_los_demas_2_h.html
http://blog.adlo.es/2006/08/con_el_dinero_de_los_demas_3_l.html
http://blog.adlo.es/2006/08/con_el_dinero_de_los_demas_4_t.html
http://blog.adlo.es/2006/08/con_el_dinero_de_los_demas_5_l.html
(entradas originales de http://blog.adlo.es/)

2 comentarios:

Jose Herrero dijo...

Este es un claro caso de "es mejor quedarse callado y parecer tonto que abrir la boca y demostrarlo".

Da a entender que tras el videojuego hay una mentalidad puramente machista y conservadora que se nos transmite a través del juego cuando, precisamente empresas como Nintendo, han destacado por hacer videojuegos aptos para todos los públicos por su inexistente contenido de violencia, sexo y otros aspectos no aptos para menores.

La escritora escribe con un tono de resentimiento cada vez que habla de una figura masculina y de su actitud.

Entiendo que si te muerde un perro, cada vez que veas uno, creas que te va a morder pero no puedes basarte en tus experiencias personales para ralizar un estudio porque no es objetivo, por lo tanto me parece que la redactora del informe no es nada profesional.

La opinión más acertada que he oido respecto a las mujeres y los videojuegos fue la de Gonzo (programador de Commandos) el cual dijo: "A los hombres nos gusta la rivalidad, ganar a otro, demostrar que somos mejores o que nos podemos superar a nosotros mismos. A las mujeres en cambio lo que les gusta es experimentar, por eso, en el mercado, el juego Sims ha sido un éxito para el público femenino."

fergusrg dijo...

Que bien te expresas, si algún día mi puesto de bloggero queda vació, sería un honor que me sustituyeras.

No lo había pensado pero si que parece una mujer resentida la que escribe, seguramente un día como hoy (San Valentín) lo pasa en casa con su gata alimentando su rencor hacia los hombres.